El árbol fugitivo, de Juan Miguel Sánchez García, transita entre lo poético y lo narrativo. Aunque nos presenta situaciones y atmósferas distintas en los 49 poemas que lo componen, siempre lo hace alrededor del deseo de un encuentro. Busca en lo más escondido de la ciudad, explora en los libros, indaga en la ecología, la filosofía o en el misterio de la vida, en un afán de plenitud. Busca arraigarse, mientras el árbol y el misterio escapan.