Sería poco oportuno en estos momentos de urgencia negar el gran valor social que tiene un programa público como Sant Andreu Contemporani. Es parte de su esencia y se refleja no sólo al crear comunidad entre la escena artística más joven, participando en su cohesión; sino también a través de políticas de proximidad intrínsecamente relacionadas con la educación.
En este numero, el crítico, comisario independiente y editor Peio Aguirre nos habla sobre el énfasis educacinal en las prácticas artísticas, curatoriales y museísticas. Él mismo dice que hay siempre un halo de polémica cuando se dice que el arte no se puede enseñar y al mismo tiempo es en sí mismo siempre educación. O en la defensa de un arte que no habla de educación sino de un arte como experiencia educacional.