Ha habido muy pocos grupos de rock españoles tan personales y emocionantes como Extremoduro. Roberto Iniesta, su fundador y emblema, acuñó la expresión «rock transgresivo» para definir el tipo de música que hacían, caracterizada por la unión de una poesía de una fiera visceralidad, sin parangón en el ámbito de la canción popular, y unas estructuras musicales que se rebelaron contra las fórmulas al uso. Pese a ser ignorados durante años por los grandes medios de comunicación, su discurso sedujo a miles de personas de distintas generaciones y estratos sociales, y se convirtieron en un fenómeno cultural digno de estudio.
En este libro, además de un exhaustivo recorrido por su trayectoria, desde sus durísimos inicios hasta su disolución en 2019, el autor lleva a cabo un profundo análisis del imaginario de esta banda a través de la disección de sus letras, cargadas por igual de «poesía y nitroglicerina».
Considerado por muchos críticos y colegas el mejor grupo español de rock de todos los tiempos, su nombre sigue teniendo tintes de leyenda. Algo a lo que contribuyó sobremanera la honestidad profesional del tándem formado por Robe e Iñaki «Uoho» Antón. Puesto que Extremoduro perteneció a esa reducida estirpe de artistas que se resiste a hacer concesiones de ningún tipo a la industria y al mercado.